Llevo 5 años viviendo un bucle. Creo que olvido cosas, pero después la perfección de mi egoísmo se hace sueño y me atrapas de nuevo. Recuerdo cuando íbamos a la playa y el viento que entraba por tu ventana hacía que me llegara tu olor de forma nítida. También recuerdo que fuí un gilipollas. Tú también fuiste gilipollas.
Después me viene a la cabeza un banco a las 8 de la mañana, y un bar cutre meses después e insultarnos mientras sonreímos. Y otras cosas. Pero en mis sueños siempre somos mejores personas.
#Bed Tales Six: Las escaleras del hotel
Te he visto desde la puerta, pero en vez de hablarte, mi orgullo me hace girarme y subir las escaleras. Cuando llego al primer piso, veo por el hueco que me estás siguiendo.
Sigo subiendo. El tercer piso es donde me alojo, o eso parece, y además, el último del hotel. Da la sensación de que por encima sigue habiendo edificio, pero no se puede llegar a él. Al menos no por ese camino.
Me coges del brazo y me giras, y nos decimos cuatro cosas con lo ojos. Después me besas como yo siempre había soñado que harías algún día.
Y ahí acaba todo otra vez.