_El Fin.

Esta mañana me dirigía al trabajo en el suburbano.

En la estación de Arsenal y como de costumbre en todas las estaciones tanto  el conductor del tren (megafonía interna) como el encargado del andén (encargada en este caso, megafonía del andén) daban el aviso de puertas cerrándose.

Mind the doors, please mind the closing doors.

La gente se ha apretado un poco, hacia el centro del vagón. Como de costumbre.

Pero hoy, algo diferente ha ocurrido. De hecho, han ocurrido dos cosas, una detrás de la otra, no necesariamente opuestas entre sí, quizá sólo algo distantes, pero eso sí, la segunda causante de una catástrofe conocida por todos pero negada a hurtadillas, por si acaso:

1- El maquinista ha añadido lo siguiente tras el aviso de seguridad:

Morning, Elena. 

y 2- Me he dado cuenta que he sido probablemente la única persona en todo el vagón que ha sonreído de oreja a oreja al oírlo.

Y ahí. En ese preciso momento. En ese instante he sabido a ciencia cierta que toda esperanza está perdida.

Estamos condenados.

Se acabó.

2 thoughts on “_El Fin.

Leave a Reply

Fill in your details below or click an icon to log in:

WordPress.com Logo

You are commenting using your WordPress.com account. Log Out /  Change )

Facebook photo

You are commenting using your Facebook account. Log Out /  Change )

Connecting to %s

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.