No se muy bien qué ha pasado ni que va a pasar. Solo sé que no has cambiado nada en estos años. Nada. Siempre llevándolo todo a tu terreno.
En el fondo, es mi culpa. Porque me dejo. O al menos me dejaba. Todo el mundo ha crecido, y me ha dado la sensación de que tú, no.
Al menos ha quedado claro hasta donde podemos llegar cada uno. Algo que era muy difuso la última vez que nos vimos.