_El pastel

La gente tiende a no medir lo que dice, quedándo desnudos ante la respuesta del otro.

Muchas veces, somos gilipollas (algunos emplean todos sus esfuerzos en reiterar esta actitud) y pensamos que la gente personaliza ex profeso lo que tenga que decir al mundo, para que encaje con lo que nosotros estamos esperando recibir. En la mayoría de las situaciones, (lease ésta) todo esto no es más que un jodido simulacro, nada es real. Tu te lo guisas, tu te lo comes.

Waw, ¿en serio? No jodas hombre. Después de todo el tiempo que hemos estado fingiendo el uno con el otro, me saltas con esto. Como se puede ser tan… “chei”. No hay otra puta palabra. Echas por tierra toda la mentira que teníamos construída para sacar a relucir el Verdadero Pastel que todo este tiempo ocultabas. Toda la mierda que me has dado a cucharadas mientras dormía, probablemente cada noche, ahora asoma, y debajo se intuye un iceberg de odio acumulado.

Si te digo la verdad, me he sentido violado, y violento, cuando he visto lo que tenía que ver. Ese era tu objetivo, así que felicidades. He contenido mis ganas de tomarlo como algo personal. Eso no lo has conseguido, pero casi. Pero después he dicho, que cojones, ¿y sabes qué? Cada vez que yo tome parte en eso-que-tu-sabes-cuya-advertencia-no-deseas, te voy a advertir alegremente.

¿Conoces el término “arteria femoral”? Ahí es donde va a ir cada una de las ostias que yo de, cada vez que me vea en la necesidad de dar alguna.

Por desagradecidx y por egoísta.

Leave a Reply

Fill in your details below or click an icon to log in:

WordPress.com Logo

You are commenting using your WordPress.com account. Log Out /  Change )

Twitter picture

You are commenting using your Twitter account. Log Out /  Change )

Facebook photo

You are commenting using your Facebook account. Log Out /  Change )

Connecting to %s

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.