Para creer que nuestras vidas tienen sentido, creemos ciegamente en cosas que no tienen sentido ninguno.
Delegamos en la religión las tareas que nos abruman, y que no podemos afrontar.
No son horas . . .
Reflections from a voluntary exile.
Para creer que nuestras vidas tienen sentido, creemos ciegamente en cosas que no tienen sentido ninguno.
Delegamos en la religión las tareas que nos abruman, y que no podemos afrontar.
No son horas . . . 
Dios existe desde que existe el hombre. Supongo que ya es hora de aceptarlo (no como ente superior, sino como creación del cerebro humano) como parte de nuestra vida, seamos ateos, agnósticos o fanáticos.
Tantos años de relación directa con Dios y sus bocas (y bolsillos) terrenales me han hecho sentir un respeto nulo por la institución, pero cierta camaradería distante con el ser superior en sí. Es de humanos ser débil, y también esperar que alguien nos arregle a vida, a ser posible alguien que no nos pida explicaciones hasta que hayamos muerto. Creo que eso tiene mucho sentido.
Supongo que hasta que se convierte en lo único que te mantiene con vida. Entonces creo que no tiene mucho sentido vivir en sí.
Y a ti, ¿qué te mantiene con vida?