En el suelo hay un dibujo de una playa. Y un bote vacío de Vicodina.
Y ahora, incomprensión en la cara de Inés. Ah, y pánico.
Y otra vez incomprensión.
– ¿Por qué estás a su lado y no haces nada? Después de que te haya hecho un dibujo y todo… Eres un hombre malo.
Él la mira, y no dice nada. Saca su teléfono y llama a una ambulancia, mientras recoge el dibujo del suelo y lo posa delicadamente sobre la mesa.
Cuando se gira, Inés no está allí ya, pero tampoco parece importarle demasiado. Total, ¿Qué va a poder hacer ahora para calmarla? Probablemente… nada.