Me agarro a un clavo ardiendo.
Creo que la vida hace que las cosas dificiles, a su vez, sean las que más merecen la pena.
Creo que no soy quien para desperdiciar esto.
Creo muchas cosas.
Creo que mañana será otro día.
Creo que mañana podré formular de nuevo la frase anterior.
Creo que lejos, no lo es tanto.
Creo que cerca puede ser lejos.
Creo en aprovechar las oportunidades.
Creo que solo tenemos una oportunidad de pasar por esto mundo.
Creo que somos efímeros.
Creo que nos preocupamos demasiado por todo.
Creo que las cosas por las que no te preocupas, mueren.
Creo que es mejor no hacer como que no pasa nada.
Creo que lo anterior es aplicable a muchas cosas.
Creo que necesito vacaciones, y acabo de volver.
Creo que no moriré de extrema vejez.
Creo que me duele la pierna desde hace años.
Creo que otorgamos a las cosas un grado de complejidad sólo porque siempre cunde el pánico.
Creo que adelantarse a los acontecimientos, es vivir al límite.
Creo que mañana voy a beber hasta caer.
Creo que el viernes voy a beber hasta caer.
Creo que el sabado voy a beber hasta caer.
Creo que el domingo me daré cuenta de que los 3 días anteriores han sido una absoluta pérdida de tiempo.
Creo que ya basta de creer tanto.
Creo que ya es hora de empezar a ver.
Y..¿no veías hasta ahora? Yo creo que sí, alguien tan observador no se lo permitiría.
No son horas no, la 1.30 y aqui sigo
Socorro
Sí veía.
Pero había cosas que sólo podía anticipar.
Ahora sabemos lo que hay.
Y merece la pena.
Agonía, eso.
Adrenalina, eso
Luz al final del tunel, eso
Alcohol, eso
“Yo maté a ese miserable viejo bobo.
Y ahora te mataré a tí con tu propia katana, que en un futuro muy próximo se convertirá en mi katana”
Mi eso, no más eso…